Para disfrutar de un acuario sano, con peces exhibiendo sus colores más intensos, es necesario mantener el agua de nuestro acuario bien limpia y acondicionada.
El agua es el medio que da vida a peces, plantas y otros organismos que habitan nuestro tanque, por eso es fundamental realizar un cambio de agua de forma regular, averigua como hacerlo en condiciones a continuación.
Reproducir las características exactas de un arroyo en un acuario es algo complicado, existen como todos conocen maquinarias como el filtro, el termocalentador o la lampara que emulan ciertas características de los ríos y arroyos tropicales. Algunas de esas características del arroyo o río que se pueden emular son la luz, las horas de iluminación, las plantas en algunos casos, incluso podemos tener algún invertebrado, pero la calidad del agua pese a nuestros intentos de filtrarla decae y pierde los nutrientes convirtiéndose cada vez en un agua más dura.
El cambio de agua es la solución a su envejecimiento. Este cambio se debe realizar de una manera regular que dependerá de las condiciones de cada acuario. Cuanta más población de peces y menos plantas tenga nuestro tanque mayor será la frecuencia de cambio. Normalmente una sustitución de agua por cada 14 días será suficiente.
Pasos a seguir para hacer un cambio de agua correctamente
Realizar un cambio de agua puede ser mortal para los habitantes de un acuario si no se hace correctamente.
- En primer lugar deberemos llenar un recipiente o varios con el total de agua que vayamos a sustituir con el objetivo de que repose el agua (y desaparezcan esas burbujas de la presión del agua, etc…). Después tendremos que apagar el filtro y el calentador para evitar que mal funcionamiento de los mismos estropee estos mecanismos. Los calentadores por ejemplo si están encendidos sin estar completamente en contacto con el agua pueden llegar a explotar.
- El segundo paso, es retirar el agua el agua del tanque. Podemos hacerlo mediante un tubo de plástico absorbiendo el agua hacia los recipientes. Pero hay que tener cuidado de no hacer demasiada succión para evitar atrapar a los peces con la corriente.
- Una vez que hayamos retirado como máximo 1/3 del agua del tanque podemos proceder a rellenar el tanque con el agua nueva. Podemos seguir varias estrategias para molestar a los peces lo menos posible, yo suelo seguir el siguiente procedimiento. Abro mi filtro de cascada, y voy echando el agua nueva poco a poco sobre la masa filtrante del filtro, de esta manera consigo no crear corrientes, ni lluvias de burbujas, y hago que el cambio sea prácticamente inapreciable. También se puede hacer el rellenado de agua virtiendo la misma sobre la mano que colocaremos sobre la superficie del acuario para evitar así que se muevan tanto las plantas como la gravilla del fondo.
Errores garrafales en el cambio de agua
Suele ser muy común sobre todo entre los usuarios más inexpertos cometer algunos errores fatales para la vida en el acuario. ¡Apunta!
- Hay que procurar que el agua que introduzcamos al acuario cambie la temperatura del tanque en ±2 ºC porque podemos provocar una embolia a nuestros peces. El descenso de temperatura suele ser mejor aceptado por los peces ya que muchos de ellos lo entenderán como una estación de lluvias o como momento para que comience la procreación. El aumento rápido de la temperatura puede provocar la aparición de burbujas en la sangre de los peces, fatal.
- Es muy importante no introducir sin previo reposo el agua nueva. El agua del grifo puede tener una presión de varios bares es decir tendrá seguramente unos indices altos de aire en disolución que al mezclarse con el agua del tanque liberarán miles de burbujitas de aire que pueden agarrarse a las branquias de los peces provocándoles así un trastorno respiratorio que les provocaría la muerte.
- Si se te pasa unos días cambiar el agua, no intentes vaciarlo casi entero para renovarlo, es mejor cambiar partes pequeñas del agua de modo más frecuente.
- Por último y no menos importante, hay que evitar a los peces sufrimientos innecesarios. Se paciente y vierte el agua con tranquilidad las prisas en este caso solo pueden ocasionarte problemas; peces asustados que saltan fuera del acuario, piedra que cae sobre pez (difícil pero posible), plantas que se sueltan del fondo, etc…